Blog Pejotero

Una amiga me escribe un día para invitarme a un viaje, nosotras no nos vemos en mucho tiempo pero eso no impide que sigamos siendo las mejores amigas, ella es una de esas amigas que nunca dejó de estar pendiente de mí; es de esas personas que a la hora que sea va estar para demostrarme que no estoy sola. ¿El viaje a donde era? Nada más y nada menos que escalar el Cerro 3 Kandu, el punto más alto del país (Paraguay). Me dijo: “V amos sique, te va a hacer bien despejarte y salir de la rutina”  y me dispuse a preparar para la aventura (nunca había hecho ninguna actividad similar). Llegando al lugar inicia el sendero para subir al Cerro. ¿El pequeño detalle? Eran las 21:00 hs. para ser exactos, mi amiga era la que tenia una linterna e iba indicándome el camino, mostrando donde debía pisar, sostenerme, etc. (los que ya hayan subido sabrán que es un poco peligroso el sendero y más de noche). “Dale Nil”, “Descansa un ratito”, "Ahí pisa Nil”, “Atajate de esa rama”, "No sueltes la c...

¿Es un despertar espiritual realmente la respuesta? Vidas vacías. Familias rotas. Iglesias estancadas. Una nación que se desintegra. No existen soluciones humanas definitivas para los desafíos que estamos enfrentando.  Necesitamos el poder vivificador de Cristo Jesús. Necesitamos un derramamiento del Espíritu Santo.  Necesitamos caer sobre nuestras rodillas y clamar al Padre pidiendo ayuda. Un Clamor es un llamado al despertar espiritual a nivel nacional, un clamor a Dios para que su gloria sea manifestada y obre con poder extraordinario.  Y es un llamado a la iglesia a buscar el rostro de Dios, a apartarse del pecado, y dejar de comprometer su fe y abandonar la auto-complacencia. Finalmente es un llamado a la acción .  Como en aquellos momentos determinantes en la Biblia cuando todo el pueblo de Dios oraba unido, cuando quebraban sus ídolos, y de nuevo rendían su vida al Señor. Un Clamor une a aquellos cristianos que puedan sentir esa necesidad de urgencia espirit...

Solo tenemos que amar a nuestro Señor ahora y siempre, debemos estar listos para encontrarlo. En una ocasión, una persona me hablaba y me decía: ¡Qué bueno sería si pudiéramos predecir ciertos dolores y sorpresas en la vida! . Viviríamos más pacíficamente y aún podríamos pensar en un segundo o tercer plan. Seguí pensando para mí mismo: ¿Es realmente así? “En ese momento, Jesús dijo a sus discípulos: ¡Cuidado! Presta atención, porque no sabes cuándo llegará el momento. Es como un hombre que, al salir al exterior, deja su hogar bajo la responsabilidad de sus empleados, repartiendo su tarea a cada uno. Y ordenó al portero que vigilara. Vigila, pues, porque no sabes cuándo viene el dueño de la casa: por la tarde, a medianoche, al amanecer o al amanecer. Para que no suceda que, viniendo de repente, te encuentre durmiendo. Lo que les digo, se lo digo a todos: ¡Miren! (Marcos 13, 33-37) ” Necesitamos vivir nuestros días pensando en cómo deberíamos ser cuando el Señor regrese a su gloria, enc...